Aprendé a cuidar tu energía: el año tiene 12 meses

¿Te preguntaste alguna de dónde proviene la energía qué te estimula y te motiva a emprender e ir tras tus metas? Esa energía no viene del ambiente, ni del espacio exterior, no se compra, ni se vende, la fuente está en vos, en tu interior. Con seguridad, en situaciones te sentís capaz de subir al Everest y en otra, abrir los ojos cada mañana significa la hazaña más grande de la humanidad. ¿Por qué sucede esto? La cuestión radica en cómo gestionamos la energía personal, ese activo tan valioso que tienen las personas, que necesita ser cuidado y trabajado para evitar que se agote. Por ello, ante situaciones de estrés, de esfuerzo desmedido aparece el cansancio y es ahí cuando es necesario recuperarla. Pero lo ideal, sería no llegar a la fase de agotamiento, sino encontrar un plan o un método para cuidarla y mantenerla con un nivel de rendimiento constante y poder así alcanzar el propio propósito.

Entonces, ¿cómo trabajar la energía personal sabiendo que el año tiene 12 meses? Expertos en psicología aseguran que no existe un órgano donde se deposite concretamente, sino que reside en las células y para poder fomentarla es importante trabajar sobre el cuerpo y la mente.

Sucede que muchas veces se hace la operación matemática a la inversa, se piensa en emprender, en iniciar un proyecto, un negocio, en estudiar sin contemplar la reserva de energía con la que se cuenta. Por lo cual, antes de iniciar un recorrido, el que sea, el primer paso es revisar las condiciones del vehículo que te conducirá hacia la meta: tu cuerpo (y tu mente).

¿Estás de acuerdo? ¡Sigamos!

La clave está en fomentar el autocuidado para poder transcurrir los 12 meses de un año satisfactoriamente, disfrutando del proceso y no padeciéndolo, sin renunciar a los proyectos, a los planes, ni a las cosas que disfrutas. Mantener estable el nivel de energía personal se aprende con el tiempo, con aciertos y desaciertos, con la observación y con prácticas adquiridas.

La propuesta para aprender a cuidar y administrar correctamente la energía y llegar al mes 12 manteniendo el rendimiento es simple y está más cerca de lo que imaginás. Se trata de adoptar una actitud proactiva, positiva y constante trabajando el cuerpo, las emociones y la mente.

¡Trabajar la energía personal para alcanzar tu propósito!

El cuerpo. El cuerpo es uno solo y no hay cambios, ni devoluciones, entonces ejercitarlo, ponerlo en movimiento es muy importante, porque en esta actividad se liberan hormonas como la dopamina, la serotonina y la endorfina, que brindar la sensación de placer y felicidad. La propuesta es incorporar a tu calendario semanal, rutinas de trabajo físico: caminatas, un deporte, gimnasia, una actividad que te permita estar activo y al mismo tiempo que disfrutes.

Las emociones. El ser humano es un ser emocional por naturaleza y eso hace que los sentimientos guíen y conduzcan la rutina. Cuando se siente alegría, entusiasmo con seguridad sos más productivo, proactivo y lográs mejores resultados. Pero ahora, cuando las emociones negativas invaden la mente, en primera instancia consumen parte de la energía personal causando malestar, desgano, tristeza y por tanto te sentís incapaz. La clave, es aprender a gestionar esas emociones, identificarlas para poder transformarlas en un desafío a cumplir. Cuando se presenta una emoción negativa, practicar un ejercicio de relajación, respiración, incluso de meditación puede resultar muy útil para ayudar a canalizar. La música, es un aliado perfecto para armonizar esas emociones negativas. ¡Esta playlist es la indicada!

La mente, es la guía que dirige todo, y te conduce a tu propósito. Por ello, es primordial contar con una mente clara, descansada y optimista. La organización de las acciones, las tareas y los objetivos en relación al tiempo es fundamental, para administrar tanto la energía como el tiempo de manera correcta. Resulta muy útil trazar un plan anual que permita fijar prioridades en las acciones.

Resumiendo, la energía personal es el recurso más valioso que tienen las personas, y por tanto el motor para impulsar y alcanzar tu verdadero propósito. Esa energía no es infinita, sino que se agota y para evitarlo, se debe aprender a cuidarla todos los días. ¿La fórmula? Trabajar el cuerpo, las emociones y la mente de modo consciente y coherentemente.

¡Las recomendaciones!

  • Tu cuerpo es único, la energía debe alimentarse todos los días. ¡Sé amable con vos mismo!
  • Identificá todo lo que te hace bien y lo que no te gusta y aprendé a transformarlo en una oportunidad de crecimiento. ¿Qué situaciones son las que te “chupan la energía”? ¿Qué es aquello que te renueva las baterías?
  • Identificá con claridad tu propósito y si estás poniendo esa energía en conseguirlo.

¡Gestionar la energía personal no es tan difícil, es cuestión de organización y hábitos! Lograr armonía entre tu propósito de vida, tu cuerpo, tu mente y emociones es el camino perfecto para mantener tu energía personal a tope durante los 12 meses del año.

¿Cómo cuidás tu energía personal?

¿Cuál es tu plan para mantener el rendimiento los 12 meses del año?